Características del buyer persona de mi negocio o sector

Características del buyer persona de mi negocio o sector

La definición del buyer persona de un negocio es de vital importancia para incrementar la visibilidad, el tráfico de clientes potenciales de valor en sus espacios digitales, la reputación de la marca, sus tasas de conversión y su rentabilidad. 

Este concepto, en ocasiones, se relaciona con otros como target, aunque no son lo mismo. En todo caso, se trata del público ideal de una marca: es una figura clave para lograr que las estrategias de marketing o las campañas publicitarias desarrolladas por las empresas obtengan un alto rendimiento. Te contamos más a continuación sobre este concepto.

¿Qué es el buyer persona de una estrategia de marketing o empresa?

El buyer persona de una empresa es el estereotipo de consumidor ideal para el cual están diseñados los productos o los servicios que oferta. Dicho de otra forma, es una representación detallada del cliente potencial de una marca. 

Para definir los perfiles de buyer persona de las empresas, se recopilan y analizan múltiples datos de interés que presentan los grupos de personas a las que queremos atraer, convertir y fidelizar. Entre ellos, la información demográfica, determinados datos de carácter personal y profesional, así como otros aspectos relativos al comportamiento o a su conducta online

Se trata de todos aquellos rasgos significativos que son comunes y nos permiten realizar agrupaciones y distinciones entre las personas que componen nuestra audiencia. La idea es lograr entender con mayor claridad sus necesidades y ofrecerles productos o servicios basados en sus carencias o que les permitan, de una mejor manera, realizar sus actividades cotidianas o las relacionadas con su centro de trabajo. 

De modo general, resulta habitual que las empresas delimiten varios arquetipos de cliente potencial. De modo que el contenido, las estrategias, las ofertas y hasta la imagen de la marca son parámetros ajustables para lograr impactar con mayor profundidad en las personas que presentan una necesidad dada, sin importar el segmento de público al que pertenecen. 

Otro de los aspectos que también debes tener en cuenta en el proceso de creación de los perfiles de los buyer persona son aquellos relacionados con los intereses, las inquietudes, las motivaciones, las problemáticas, las expectativas y las preocupaciones que tienen las personas, además de los rasgos que definen su comportamiento o sus preferencias de búsqueda.

Descripción de la información necesaria para la definición del buyer persona

Para la creación de los perfiles de buyer persona de un negocio se necesita un amplio volumen de información que permita ubicar a cada persona en un grupo específico. Para cada grupo se diseñarán estrategias de marketing y soluciones a la medida que den respuesta oportuna a sus principales necesidades.

Entre esta información están:

Los datos personales. En esta categoría también se incluyen los principales intereses, motivaciones, entretenimientos o hobbies de las personas. Además, por otra parte, de los objetivos que persiguen, los aspectos que las hacen felices y los sucesos o individuos que influyen en su toma de decisiones. 

Los datos laborales o relacionados con el plano profesional. Campo al que pertenece, cargo o profesión que desempeña. Y sus principales responsabilidades, aspiraciones y preferencias.

La conducta online. Modos en los que accede a los datos, preferencias de búsqueda de información y frecuencia con que lo realiza. Redes sociales de su interés, sitios de referencia o el horario y el tiempo en el que permanece conectada.

El vínculo que tiene con la empresa. En este punto, resulta interesante saber cómo supo de los productos o los servicios que se le brindan, el nivel de interacción que tiene con la marca y qué valores posibilitan que esta sea parte de sus preferencias.

Diferencia existentes entre buyer persona y target

Cuando hablamos del target hacemos alusión al universo compuesto por la totalidad del público objetivo que ha sido identificado por una marca. El cual está compuesto, a su vez, por personas que, de modo general, presentan rasgos o características similares, como la edad, el sexo, la ubicación geográfica o el poder adquisitivo. Sin embargo, para su definición no se tienen en cuenta las necesidades puntuales de cada una de ellas. Este punto dificulta la creación de contenidos o productos más personalizados, capaces de conectar mejor con las preferencias informativas de un determinado grupo de usuarios definidos con antelación.

Con el target se trata de atraer tráfico de calidad e incrementar las tasas de conversión, según el segmento de público identificado. En cambio, cuando el proceso se centra en el buyer persona el objetivo es encontrar, dentro de los diferentes segmentos de público definidos en la organización, aquellas personas que presentan la problemática o la necesidad a la cual se le está ofreciendo una solución. 

De manera general, con la figura del buyer persona se tienen en cuenta a todos aquellos posibles clientes que comparten el mismo problema. Pero el target, al enfocarse a un segmento de público determinado, no aprovecha al máximo las estrategias definidas. 

¿Por qué es esencial que los negocios definan a los buyer persona?

Entre las principales ventajas que puedes obtener al definir los perfiles relacionados con tus buyers figuran:

Contribuye a conocer, de una mejor manera, los rasgos que presentan sus posibles clientes o clientes potenciales.

Ayuda a realizar creaciones a la medida. Lo cual se aplica tanto para el proceso de desarrollo de contenido de valor para la marca y sus posibles clientes como de productos, así como para la planeación de estrategias de marketing o el lanzamiento de servicios.

– Permite que las marcas potencien y hagan un uso eficiente de los canales preferidos por sus clientes potenciales. Esto ayuda a que se incrementen el nivel de contacto, el de interacción y las tasas de conversión.

Ahorro de los recursos destinados al desarrollo de las acciones de marketing


El rol del buyer persona es clave en el éxito de las campañas publicitarias y en el incremento de las ventas y la rentabilidad de las marcas. Y es que permite extraer datos significativos sobre la audiencia para lanzar productos y servicios que den una respuesta eficiente a sus necesidades, sin importar el segmento de público al que pertenezcan.